Daurière, un Zuavo Francés de leyenda en Magenta y México

En 1859, los estados italianos de Piamonte y Cerdeña buscaron liberarse de la dominación austriaca. Para ello, reciben ayuda de los ejércitos franceses de Napoleón III, que participan en la Campaña de Italia contra los ejércitos austriacos. El 4 de junio de 1859. Las tropas francesas, confrontadas con los austriacos dirigidos por el mariscal Ferencz Gyulai, luchan en la batalla de Magenta, en Lombardía. A la cabeza del segundo Cuerpo, el general MacMahon (1808-1893), toma la iniciativa, cerrando al enemigo que se ve obligado a esconderse en la ciudad antes de ser abrumado.

Los Zuavos, bajo el mando del general Charles-Marie-Esprit Espinasse (1815-1859), quien murió durante la batalla, contribuyeron en gran medida a la victoria obtenida tras varios asaltos mortales. Los hombres del 2º regimiento de zuavos especialmente cubiertos de gloria. Dos batallones del regimiento lograron romper el ataque del 9º regimiento austríaco que intentó apoderarse de una batería francesa, justo antes del ataque francés el 2º general de cuerpo de MacMahon. Los Zuavos luchan contra los tiroleses en combates cuerpo a cuerpo en las calles de Magenta, hasta que cae la noche. El Zuavo Daurière, de la 2ª compañía, se las arregla para apoderarse de la bandera del regimiento austríaco, mientras que los soldados austríacos defendiendo su bandera son asesinados por los hermanos en armas de Daurière liderados por el suboficial Savières. Daurière logra abandonar el lugar y es llamado por el general Castagney, quien lo felicita por su osadía y su guerra. El impacto es tal que el mariscal MacMahon lo decoró, al Zuavo Daurière con la Cruz de los Valientes. También les otorgo la misma medalla militar al Suboficial Savières y Antonieta Trémoreau, cantinera del 2º regimiento de zuavos. En cuanto al regimiento, fue condecorado con la Legión de Honor.

La batalla de Magenta causó entre casi cuatro mil muertos y heridos en las filas del ejército franco-piamontés, además de varios cientos de desaparecidos. En cuanto a los austriacos, fueron más de ocho mil entre muertos y heridos. La Legión Extranjera, que participó en la batalla de Magenta al enfrentarse a dos regimientos extranjeros, sufrió graves pérdidas, lo que demuestra su legendaria belicosidad: cuatro oficiales, más de cincuenta suboficiales y soldados son asesinados allí, sin contar más de ciento cuarenta heridos. Un oficial, el capitán Jean Danjou (1828-1863), conocido por su valentía en la batalla ante el fuego enemigo, es nombrado caballero por orden de los santos Mauricio y Lázaro.

Los Zuavos del 2º  y 3º  regimiento continuaron aumentado de gloria en la campaña de México entre 1861 y 1867. Entre cuatrocientos y cuatro cientos ochenta zuavos y del regimiento de cazadores, brillaron especialmente en la batalla de Cerro Majoma,  el 20 de agosto de 1864, en la provincia de Durango, frente a cuatro mil quinientos mexicanos. En cuanto al capitán Danjou, también alcanzó gran gloria, en particular el 30 de abril de 1863, resistiendo hasta la muerte, con unos sesenta legionarios, en una hacienda del pueblo de Camarón de Tejeda (Camerone), con varios cientos de Mexicanos que, al final de la pelea, pagaron con honores militares a los seis sobrevivientes. Desde entonces, cada 30 de abril, la Legión Extranjera celebra la batalla de Camerone y rinde homenaje a sus caídos, e indirectamente a los extranjeros que, desde 1831, sirven la bandera francesa. Entre todos estos luchadores, el Zouave Daurière es sin duda el más famoso antes de la derrota de 1870.
Fuente: Mémoires combattantes.
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