La historia de la Filà Tercio de Zuavos (originariamente denominada Zuavos del Papa) está llena de tradiciones y simbolismos que han sido transmitidos de generación en generación. La fotografía que se analiza en este artículo es una de esas joyas históricas que, aunque desconocida hasta ahora, ofrece una ventana invaluable al pasado, gracias a la tarea infatigable de investigación de Zuavos del Mundo. Esta imagen, publicada en La Voz de la Tradición el viernes 1 de marzo de 1912, probablemente fue capturada durante la entrada del viernes 2 de febrero de ese mismo año. En ella, se pueden observar diversos detalles que merecen una atención especial, ya que enriquecen nuestra comprensión sobre los elementos distintivos del Tercio de Zuavos de principios del siglo XX.
Contexto Histórico de los Zuavos del Papa
Los Zuavos del Papa, más conocidos como los Zuavos Pontificios, un cuerpo militar formado para la defensa de los Estados Pontificios el 1 de enero de 1861 ( y no la Guardia Suiza Pontificia en la que se suele confundir), dejaron una profunda huella en la tradición militar y religiosa. Tras la unificación de Italia y la caída de los Estados Pontificios tras la Toma de Roma del 20 de septiembre de 1870, la figura del Zuavo se mantuvo viva en las conmemoraciones y festividades, especialmente en el marco de las celebraciones de Moros y Cristianos en varias localidades de España. En este contexto, la Filà Tercio de Zuavos de Bocairent emerge como una de las representaciones más emblemáticas, manteniendo vivos los vestigios de una historia cargada de fervor religioso a su patrón San Blas.
La Fotografía de 1912: Un Testimonio Visual
La fotografía de 1912, objeto de este análisis, es una rara instantánea que captura con gran detalle a los miembros del Tercio de Zuavos en un momento clave de su historia. Al observar la imagen, es inevitable centrarse en la figura del capitán de ese año, Francisco de Paula Cabanes Cabanes, quien se erige como una personalidad destacada dentro de la Filà. Su indumentaria, cuidadosamente detallada, así como otros elementos presentes en la escena, ofrecen una rica fuente de información sobre las costumbres y tradiciones de la época.
Francisco de Paula Cabanes Cabanes: Capitán de 1912
En la parte derecha de la imagen, se puede apreciar a Francisco de Paula Cabanes Cabanes, quien ostenta la banda de capitán, un distintivo fundamental que se complementa con la boina roja y la borla dorada. Las estrellas de capitán, visibles en la bocamanga de su uniforme, son otro elemento que subraya su rango. Además, el sable, portado en el centro de la faja con el cinturón porta sables, es un accesorio que aún hoy se mantiene en la indumentaria del capitán del Tercio de Zuavos. La importancia de Francisco de Paula dentro de la Filà es incuestionable, siendo el único miembro en los 158 años de historia que ha ostentado el cargo de capitán en cuatro ocasiones diferentes: 1912, 1916, 1923 y 1933. Detrás de él, se distingue al alférez, quien asumiría el papel de capitán en 1913, Francisco Castro Romero. A su izquierda podemos reconocer a Julian Castelló Silvestre, cronista y autor de las conocida Reseña histórica de la filada de Zuavos de Bocairente desde 1901 a 1922.
Las Picas Infantiles: Un Elemento Poco Documentado
Otro aspecto fascinante de la fotografía es la presencia de las picas infantiles, un elemento que ha sido escasamente retratado y documentado. En la imagen, se observan a los niños portando estas picas, las cuales consisten en un mástil adornado con cintas en espiral de color rojo y blanco, rematado en la parte superior con un banderín que lleva los mismos colores que los banderines actuales. Estas picas, al igual que la banderola que adornaba la boca del arcabuz de los adultos, han experimentado una evolución significativa a lo largo del tiempo. En el último tercio del siglo XX, las picas eran de color rojo, con una banderola más pequeña y un cambio en la disposición de los colores: rojo, blanco y rojo. En la actualidad, la pica es de color madera, con el banderín en los colores correctos, y ha sido adoptada también por las mujeres, quienes utilizan una versión octogonal con un remate de madera en forma de punta.
El Delantal o "Planeta": Un Símbolo de Tradición
El delantal, también conocido como "planeta", es otro elemento distintivo que se observa en la fotografía. Este delantal de piel blanca presenta una cruz patada roja, ribeteada con cinta roja, con dos círculos en la parte superior y dos semicírculos que simulan bolsillos. La principal diferencia con los delantales actuales radica en la anchura de los brazos de la cruz, que en 1912 eran más anchos. Esta cruz, que guarda cierta similitud con la cruz templaria, ha generado cierta especulación sobre los motivos de su incorporación exclusiva en los delantales. Sin embargo, su origen preciso sigue siendo un misterio.
Este delantal es utilizado actualmente por la escuadra oficial de hombres durante el día de la entrada y en la diana de Moros y Cristianos, tanto por hombres como por mujeres, aunque no de manera mixta. Esta escuadra tiene la responsabilidad de abrir el pasacalle de la diana y servir como guardia durante la celebración eucarística. El delantal, en su origen, proviene de los gastadores, quienes eran encargados de abrir paso a la compañía. Equipados con herramientas como palas, hachas y serruchos, estos hombres allanaban el camino para que el resto de la compañía pudiera avanzar sin problemas, una tarea similar a la de los zapadores modernos. El mandil, en particular, servía para proteger el uniforme del barro, la tierra y el polvo, y con el tiempo se convirtió en un símbolo de esta función.
Curiosamente, la cruz que aparece en los delantales de los niños es completamente diferente, asemejándose más a la cruz occitana, también conocida como cruz de Languedoc, cruz de Forcalquier o cruz de Tolosa. Este tipo de delantal cayó en desuso hasta que, en la década de 2010, fue recuperado para la escuadra infantil masculina, que marcha detrás de la música de la escuadra oficial de hombres. En esta nueva versión, la prenda no está hecha de piel, sino de tejido de algodón estampado con los mismos detalles que el delantal de adulto.
El Pañuelo Blanco: Un Elemento Perdido
El pañuelo blanco, que alguna vez formó parte integral del traje de Zuavo, ha desaparecido por completo, aunque sigue siendo utilizado en otras "filaes", como los Moros Vells, Marrocs y Mosqueters. Una de las teorías sugiere que la desaparición del pañuelo podría estar relacionada con el cambio en la vestimenta. Anteriormente, los Zuavos no utilizaban jerseys de cuello alto, sino camisas, y el pañuelo blanco ayudaba a uniformar mejor el conjunto, cubriendo el cuello de la camisa.
Conclusión
La fotografía de 1912 es más que una simple imagen; es un valioso documento histórico que nos permite comprender mejor la evolución de las tradiciones y símbolos asociados con la Filà Terç de Zuavos. A través de la figura de Francisco de Paula Cabanes Cabanes, las picas infantiles, el delantal o "planeta" y el pañuelo blanco, esta instantánea nos ofrece una rica visión de un pasado que, aunque distante, sigue vivo en las tradiciones actuales.
El análisis de esta fotografía no solo enriquece nuestro conocimiento sobre los Zuavos, sino que también subraya la importancia de la preservación y el estudio continuo de documentos históricos. Cada detalle, desde la vestimenta hasta los accesorios, cuenta una historia que, al ser desentrañada, nos conecta con el legado cultural y religioso de una época que sigue resonando en las celebraciones y costumbres de hoy en día.
248.205