Zuavos del Mundo tiene como finalidad la investigación, estudio y divulgación de los Zuavos. Desde su creación en Francia en 1830 pasando por los Estados Unidos de América, Estados Pontificios, Calabria, Polonia, España, Chile, Perú, Brasil y Turquía hasta hoy con los grupos de recreación histórica que mantienen vivo ese espíritu de los Zuavos desde 1867.
En tela azul oscuro con trenza escarlata y falso bolsillo en color amarillo.
Chaqueta con sello del 3er Zouave, fechado 4º trimestre 1870, registrado con el número"14524", también lleva los sellos de la diseñadora del vestuario y número del inventario.
Fuente: Betrand Malvaux
196.095
Año 1912
Capitán Francisco de Paula Cabanes 1
En las primeras juntas que se hicieron por navidad en la casa Ayuntamiento, volvieron a tratar por iniciativa de algunos representantes la cuestión de la parelleta, insistiendo en que debía llevarse a cabo lo que quedó aplazado el año anterior, aunque no pareció bien a la mayoría de los representantes teniendo que combatir acaloradamente el asunto en cuestión y por fin no adelantar ni un poco en este asunto por inmiscuirse miras políticas, dejándolo para otra ocasión más propicia, a pesar de esto la actitud de la filada fue firme y decidida, comprometiéndose a no salir a la calle si se le exigía tamaño desafuero, quedando escrito en acta para presentarlo en su oportunidad.
Hubo en el intermedio de este año fuera en San Jaime, la cual resultó bastante bien para
algunos, aunque otros faltó poco para quedarse en cueros, porque D. Antonio Ferrero que se creía que iba a una piñata de regalo se puso muy de sobretodo de abril cubano y se creía mi buen hombre que se le respetaría cual si fuera ama de llaves, pero el pobrecito se equivocó, fue montado en un flaco jumento y a fuerza de palos dio algún galope, pero en uno de estos ensayos cayó del jumento que por suerte no se hizo nada, pero huyendo de la gente fue enganchado haciéndole el uniforme en cuatro cuartos después de un buen remojón.
También hubo gazpacho a granel que fue casi lo que constituyó la comida, bastante y buen vino que fue la causa de que Bolumar cantara la pasión en el mes de Julio.
El capitán que nunca ha regateado en cuanto le ha tocado su vez, quiso que en el día de la publicación de la fiesta se hiciera paella para toda su comparsa, lo cual desde el referido año ha venido verificándose este acto como una cosa reglamentaria, que no es así, porque esto es solamente un acto voluntario y a ningún capitán entrante se le podrá exigir este gasto bajo ningún pretexto, porque no estamos por innovar cosas que graben a ningún zuavo.
Hay que advertir que en el transcurso de tiempo que va de Navidad a las fiestas hubo
individuo que recogió algunos aplausos, porque situado nuestro cuartel en el Pati se nos abría un campo algo más ancho para todos nuestros pasatiempos. Con decir que en una noche se derribó una pared, un armario, un tabique, se rompieron cuatro vasos, dos fuentes, una ampolla y por poco las piernas del Suat, está dicho todo porque Visantet Cabanes, Antoli Leon Y Mujente se empeñaron en que había poco espacio para ellos en aquel momento y como era una hora que los albañiles no estaban disponibles, tuvieron a bien encargarse ellos de aquel duro trabajo, que por cierto les hizo sudar bien poco; pues llevaban las válvulas de su estómago tal velocidad que ellos eran capaces de arrastrar un tren carreta.
Sucedía esto o cosas parecidas muy a menudo, pero en vísperas de la fiesta que quisieron celebrarla dentro de la casa cuartel antes de tiempo, hubieron que librarse algunos combates de los cuales solo se hicieron 2 muertos: Indalesio y el Suat, los cuales no podían levantar la cabeza de la mullida cama del marfegón sin que se volvieran al punto de su destino y finalizó el acto el Sr. Peti que cogió la cuba de roba desde un piso 3° y fue a parar en medio del patio y gracias que no ocurrió desgracia personal. Así se gastaba entonces la broma en esta filada, pero siempre sin prevenirse, todo se hacía casual, es decir sin buscarlo.
La noche de la paella tuvimos fuegos artificiales que la dichosa caña dejó sin comer a varios que todavía estaban a medias, pero casi siempre sucede así, por complacer a algunos hay que disgustar a otros, pero tuvo un final desastroso para Espí que tan aficionado es a esta clase de fuegos porque tuvo que tomar las de Villadiego antes de tiempo.
También tuvimos embajada en el castillo que el Sr. Espí y Mojente se portaron muy bien,
pero como hacía tanto frío y en este tiempo no es conveniente tomar el fresco sin provecho, nos fuimos al casino donde se bailó la caparrosa, recogiendo Leandro muchos aplausos.
De allí nos chancearon algunos festeros y junto con ellos nos marchamos al teatro, en
donde se completó la broma porque no faltó quien de nosotros bailara en tablas, cosa que fue muy aplaudida, porque nada hay que extrañar tratándose de Leandro y de Espí.
Había en la plaza del mercado el día de la embajada algunas golosinas que mercar y nuestro capitán, que siempre estaba a punto de iniciar algo aunque fuera en perjuicio de su bolsillo, a una señal convenida se juntó el personal en el rededor de la parada más cerca y de uno en uno fueron desapareciendo todos los comestibles que había en la parada con sus correspondientes vasijas quedándose la torratera en un palmo de narices, ya lo creo que al ver la actitud alagadora del capitán no tardó en hacer gente y se estableció el campamento en la plaza de Juan de Joanes donde se distribuyó todo el comestible que habíamos adquirido tan gratuitamente.
Don Fernando Castro también se portó muy bien en este año, pues cogió una turca número uno que fue muy aplaudida por toda la comparsa.
Y es muy de extrañar en este hombre semejante proceder porque en no siendo fiestas es
en todo una persona respetabilísima y decente, pero en cuanto se mete dentro de los yaragielles como dice él a los bombachos no hay quien le sujete porque dice que le toca la china una vez al año y este hombre que se le ve siempre tan formal en cuanto se pone el uniforme se sale de sus casillas, bien por el maestro.
Afortunadamente no ocurrió ningún percance desagradable, cosa que honra mucho
a nuestra filada, mucho cantar, mucho beber y mucho admirar a los de dentro y fuera de la población, porque hay que tener en cuenta que nuestra comparsa han formado en ella
individuos de muchas opiniones, más sin embargo nunca se ha significado nadie y ese ha sido el móvil principal de atraer un número considerable de socios, porque nunca se le estorbó a nadie una idea.
Finalizó la fiesta con el orden más completo, pero tuvimos que presenciar en este último
acto un cuadro algo desagradable. Nuestro capitán que creía que los honores que le concedieron el año anterior habían de ser perpetuos estaba un tanto alegre, pero cuando llegó a la Iglesia de las monjas agustinas y le quitaron los honores para ponerselos a otro, no pudo contener la pena y se echó a llorar como un niño, costándonos algún trabajo poderle convencer hasta que le pasó aquella emoción.
Es pues todo lo que se puede decir de este año aunque todavía hay mucho que apuntar,
pero la memoria que es muy poco feliz no me ayuda para poder dar a conocer más detalles.
El sargento Antonio Castelló no pudo tampoco contener los embates de tan indisciplinada
fuerza y cuando se le rebelaron por causa injustificada no pudo contenerse y pronto les echó en cara a algunos individuos lo poco que respetaban al sargento que representa a la filada en muchas ocasiones y a consecuencia de esto desistió en el primer año de poseer aquel cargo.
Muchos años nos venía sirviendo la música de Adceneta, pero en esta época le fue imposible complacernos por carecer de las plazas necesarias y a instancia del capitán tuvimos que hacer gestiones para ajustar la música de Muro, lo cual después de cruzarnos algunas cartas nos arreglamos por 39 duros y los bagajes, 24 plazas, con lo que tuvimos una música regular que todos quedamos muy satisfechos con lo que salimos a cuentas 17 pesetas 75 céntimos, quedando en depósito para las paellas 35 pesetas y diez reales por el cartel que confecciono Julián Castelló titulado «Cuartel de Zuavos».
Representante Fco. de P. Cabanes, depositario José Mª Vañó.
Autor: Julián Castelló Silvestre (1876-1940)
1 Francisco de Paula Cabanes Cabanes
196.095
Estandarte muy ricamente bordado en hilos de seda natural y pasamanería dorada y plateada sobre seda blanca y amarilla.
Lleva un bordado en su centro las armas papales y la inscripción en oro.
Este estandarte fue ofrecido por una delegación de una asociación de damas pertenecientes a familias americanas ricas e influyentes a los zuavos papales en 1867, antes de Mentana, durante un viaje a Roma.
Este hecho está relatado en una o varias obras de la época.
Sus dimensiones son:
Altura: 125 cm.
Ancho: 103 cm.
Fuente: Bertrand Malvaux
195.900
Año 1911
Capitán Julián Mora 1
La filada de moros viejos venía desde muchos años a esta parte ejecutando sus artísticos bailes después de salir las filadas de las vísperas delante de la casa Ayuntamiento, lo que hacia en parte interrumpir este entretenimiento algún tanto la fiesta, pero nadie se di cuenta porque andaba todo a la buena de Dios. Pero se dio el caso que al elegir nuestra comparsa por representante a F co. de P. Cabanes se discutió en la Sala Capitular en una de las sesiones que los representantes celebran durante el mes que precede a las fiestas y el asunto en cuestión fue calurosamente combatido por parte de los moros y algunas otras filadas que les siguieron, de lo que se siguió a raíz de esta propuesta la reclamación que por parte de los moros se hizo en contra de nuestra filada, que es como sigue:
El representante de la comparsa de moros viejos en virtud de lo antes expuesto expuso que así como todas las comparsas que tomaban parte en la fiesta de San Blas iban representadas por sus capitanes en el puesto que cada una le corresponde delante del guión en el día de la solemne procesión, quería y deseaban que nuestra filada estuviera también allí representada aunque fuera por dos individuos, o sea la parelleta tan cacareada. En el primer año se luchó de lo lindo pero sin fruto por parte de nuestros contrarios, porque la opinión general de nuestra comparsa fue que si privaban el piquete en este día no dejándolo salir completo en la procesión en el puesto de costumbre, la filada de zuavos no estaba dispuesta a salir a la calle.
Esta fue la contestación unánime de toda la filada y tuvieron que ceder ante la actitud que
vieron tan firme, pero no concluyó el asunto en este año pues todavía volvieron a recalcarlo en los dos años siguientes a este.
Dejemos pues este asunto y volvamos a coger el hilo de nuestros propósitos.
Grandes nubarrones cubrían el espacio en las vísperas de la fiesta y fue poco a poco
tomando proporciones el temporal que a consecuencia de este mal tiempo se alargó la fiesta un día, es decir que el día 3 salió un día hermoso y limpiaron las calles de la población para dar principio a las fiestas.
Orgullosa venía nuestra comparsa por el paseo con su bien formada escuadra marchando
con aquella marcialidad que le es propia, como si fuera una escuadra de esos gastadores del ejército, cuando de repente vimos que hacia nosotros venía sin freno un caballo que lo montaba uno de los nuestros.
Al divisarse de lejos se pudo dar lugar a que no sucediera alguna fatal desgracia, pues se le abrió filas y gracias a la prevención de algunos veteranos que venían atrás que fueron los que se encargaron de recoger a los niños, que si no hubiéramos tenido sin duda que lamentar alguna desgracia.
Pues esto resultó a los que quieren meterse donde no entiende, porque el Sr. Espi que
siempre ha sido encargado de distribuir las peladillas en este acto quiso meterse a lancero y si no hubiera sido por la prevención de Fco. de P. Cabanes que estuvo tan oportuno en parar al animal, hubiéramos tenido algún disgusto.
Como el barrio de San Roque es un barrio tan inhabitado y entonces era nuestro punto de
reunión, pues allí andaba todo a a las mil maravillas, tanto es así que en una noche de juerga muy cerca de las fiestas tuvimos que lamentar la célebre caída del pobre Bolumar, cuando al salir de la masía de San(t] Roc y encaramarse hacia su casa sin poderlo evitar tropezó, cayó y se rompió la costilla por lo que tuvo que estar todas las fiestas arrestado.
Esto son accidentes improvistos y no hay que comentarlos.
En este año fue otra vez el sargento de la comparsa Ramón Beneyto, el cual en viendo que no pudo por manera alguna dominar la gente después de muchos esfuerzos trató de renunciar al mencionado cargo, cosa que no se le concedió hasta que no se finalizaran las fiestas.
Como la gente junta tiene que idear cosas nuevas todos los años, en este le dio al Suat, a
Campana y Reverte junto con otros camaradas por apoderarse de algunas latas de galletas que había en casa el Sr. Antonio Ferrero y lo consiguieron aún con el disgusto de la Sra. de la casa y las latas fueron rodando por la calle del Ravalet como si fueran escombros de alguna hojalatería.
De allí se encaminó la gente a casa el Sr. Julián Mora y allí se tomó la noche sentados en el duro suelo porque a nadie le permitían las piernas el estar derecho, se cantó la serenata de la murga y con la música se fue el personal de la serenata a casa el Sr. Iborra y allí se concluyó la fiesta porque el que pudo salir salió a gata quedándose con la débil luz de una pequeña linterna en el callejón del Sr. Esteban, Cantó, Misén, Olegario y Julián, los que finalizaron el solemne acto de aquella jornada tan solemne.
Hay que advertir que en este año se admiraron todos los festeros de la buena escuadra
que salió a la calle, pues aunque costó algún trabajo y algunas luchas en el corral de Ambròs de Llanera, últimamente pudimos vencer los más y lo confirma el retrato que se hizo en este año que es el que se conserva en esta comparsa precediendo en todas las reuniones.
Tuvo que saltar la fiesta un día porque a consecuencia de un fuerte temporal de agua y nieve no pudo celebrarse la entrada en su día y esto nos tenía algo disgustados, pero el día 3 como ya antes dije, amaneció un día despejado aunque con un frío intenso capaz de helar las campanas de la torre, pero cuando se prepara la máquina con el vapor que buenamente se cree, el frio no penetra en el interior de nuestro cuerpo porque es empujado hacia fuera por una fuerza más potente, como resultó en esta fecha a que me refiero y que a pesar del mal tiempo que en un principio se presentó fue un buen año al final, porque acabaron las fiestas con muy buen orden, cogiendo la banda de alférez Fco. de P. Cabanes y aquella tarde fue una de esas tardes que se disparó mucha pólvora, pues el capitán saliente y el entrante regalaron 1 kilo de pólvora a cada individuo que tuvo a bien acompañarles, de suerte que se disparó en alma y con grande entusiasmo.
Depositario quedó nombrado para el próximo año el mismo que fue el año anterior, por
convenir así a todos.
La música de Adceneta fue ya el año este el último, por carecer de las plazas que nosotros necesitábamos y así es que ya no podían servirnos a nuestro gusto.
También hubo murga callejera, la que tuvo alguna crítica, no obstante de esto salió a la calle y fue cantada a pesar de algunos que no llegaron a tiempo para impedirlo, las cuales coplas son las que a continuación van expresadas.
MURGA DEDICADA A LES FESTES DE 1911
FORA PENES
NUMERO 1
En el añ mil nou-sens onse
en el poble de Bocairent
lo mateis que tots els añs
la festa els pobres farem.
Alguns del poble mos diuen
no sigau entusiasmats
perquè els que poden fer festa
se estan en casa amagats.
Pues nosatros som festers
la prova la donarem
que en ningun poble es fa festa
com la fem en Bocairén.
NÚMERO 2
Así fem la festa els pobres
y después som criticats
perquè els que tenen un duro
ixos tots s'an retirat
pués aixina mos eu diuen
nosatros també o veem
de que solament el pobres
fem la festa en Bocairén.
Les festes de así s'acabeu
se les aurem de deixar
que el pobre que ui treballa
li ve chustet pa menchar.
NÚMERO 3
Les festes d'así s'acaben
no és per culpa dels festers
o coneixen els del poble
y també els forasters.
Les faenes mos debaixen
tot lo demés va puchan
de què fem la festa els pobres
quisà serà el últim añ.
En Benixama y Bañeres
en Alcoy y en Ontenient
en eixos pobles, la festa
la paga l’Achuntament.
NÚMERO 4
Alguns forasters mos diuen
que pareix que siga estran
que para eixir a la festa
fem la ralleta tot l'añ.
Mosatros els contestem
que ningú mos dóna res
y encara alguns moS critiquen
pués costan-mos els dinés.
Pal consumo y els casinos
y també els establimens
para ixos és la festa
qu'és ahon van tots els dinés.
NUMERO 5
La comparsa de zuavos
esta murga han arreglat
para pasar estes festes
perquè balons s'an quedat,
per fer-li la festa'l San
s'an gastat tots els dinés
y aixina cantan la murga
no se'n recorden de res.
A San Blay, patró del poble
un favor li demanem
que mos lliure de les turques
qu'estes festes pillarem.
Autor: Julián Castelló Silvestre (1876-1940)
1 Julián Mora Castelló
195.680
Figura de teniente de Zuavos Carlistas
Fabricante: El Viejo Dragón
Escala 54 mm
Material: Metálico en color blanco.
Como se puede apreciar sigue arrastrando el mismo error en las figuras de los Zuavos Carlistas, difiriendo el color entre la chaqueta y el chaleco con el pantalón. En realidad eran el mismo color.
Fuente: El Viejo Dragón
195.440
Año 1910
Capitán Vicente Puerto 1
Por demás entusiasta y festero es el capitán que nos dirigió en este año, como no puede
ser menos pues corre por sus venas sangre de los zuavos antiguos. Su padre fue uno de los fundadores de la comparsa y como tal se le reconoce al hijo como zuavo de cepa.
No están mal fundados los motivos porque este sujeto, a pesar de vivir casi siempre en
las afueras de la población y careciendo de tiempo para acompañarnos en muchas ocasiones, no obstante de esto, nunca ha sido de los que han ido a la zaga, pues para los suyos nunca le pareció hacer bastante.
Pocos datos podremos relatar en el presente año, puesto que la desgracia del que pudo
recogerlos para estos apuntes le privó de prestar su concurso por duelo riguroso, faltándole su compañera y privándole con este fatal golpe de todo el humor que todos los años anteriores disfrutaba y por lo consiguiente y antes dicho no se pudo apercibir más que de algunos detalles pequeños que son los que afectaron a todo, porque a decir verdad el año fue fatal.
En Marzo de 1909 se cerró la Fábrica de paños de los Sres. Doménech y hermanos, y como muchos de los operarios que pertenecían a dicha fábrica eran zuavos, resultó que la filada como después del paro algunos se fueron colocando fuera de la población tuvimos alguna baja por ausencia y lo mismo sucedió en las demás comparsas, así es que resultó algo ridícula la fiesta porque muchos de los que pertenecían a las filadas no salieron este año a la fiesta.
Situado nuestro cuartelillo en San Roque no podíamos mejorar para nuestros propósitos
puesto que allí nadie venía a turbarnos la paz, pero nos la turbaron rencillas de algunos que permaneciendo a la expectativa de algunos hechos se valieron de alguna estratagema pero no les salió muy bien y hubo disgustos entre Cantó, Castelló, Marco, Peti, Calatayud, Navarro y otros que por intereses poco comunes hubo alguna diferencia por mediar algunos que pertenecian a la comparsa de moros viejos y esto disgustó un tanto a muchos que nada tenían que ver con el asunto y además que no sabían nada.
Por fin esto no pasó a cosas mayores, aunque algunos se ausentaron por espacio de un año sin llegarse a confrontar para nada a fin de poder averiguar aquel enojoso asunto.
Verdaderamente la corporación estuvo este año algo escasa de personal, pero no obstante la música de Adceneta no se negó en prestarnos su correspondiente servicio como lo había hecho los años anteriores, pero con menos plazas y por consiguiente menos precio 37 duros, 19 plazas y los bagajes a su cuenta por estar la situación del pueblo no muy buena.
Las cuentas de este año resultaron más caras y por todo lo antes dicho y más porque ya
no teníamos ningún arbitrio de ninguna clase como antes. 17 pesetas 80 céntimos fue lo que perteneció por cada individuo. Representante Fco. de Paula Cabanes, depositario José M° Vañó por dimitir de este cargo Joaquín Castelló.
Autor: Julián Castelló Silvestre (1876-1940)
1 Vicente Puerto Belda
195.295
Como decíamos en el prologo del libro Històries Suaves (Historias Zuavas), en el año 2017 la fila celebraba su 150 aniversario y, para la ocasión, un buen grupo trabajamos de valiente. Muchos miembros de la junta de la presidencia de Laura Santos Silvestre y muchos otros zuavos preparamos una exposición, un CD de música Zuava y se celebraron muchos actos que quedaran para la historia de la filà. Aquel año, con tanta cosa, éramos conscientes de que había que dejarlo todo en un libro y no lo hicimos. La pandemia, que nos ha dejado sin fiestas, nos ha dado la oportunidad de recoger todo lo que teníamos en un volumen y editarlo.
Por suerte, ya hacía años que habíamos puesto en un fichero la transcripción del libro del tío Julián. Solo había que revisarla. También, hace unos cuantos años, empezamos a pasar a texto los artículos que se habían publicado en los programas de fiestas o en otros libros a lo largo del siglo pasado. Hoy en día, todo lo que publicamos lo tenemos en archivos de texto. Los ordenadores tienen copias y copias de todo lo que hacemos. Incluso, a veces nos toca buscar y revolver para buscar algún archivo que, por una razón u otra, la hemos dejado donde no tocaba. Además, teníamos todo el trabajo que habíamos hecho para la exposición, todos los paneles, todos los textos y toda la documentación que recogimos entre todos esos años. Preparando la exposición organizamos muchas cosas de la fila y, ahora, preparando el libro, hemos organizado algunas otras.
El libro empieza con las historias del tío Julián, que van desde 1901 hasta 1922, podemos decir qué es la joya de la filà. Después hay un vacío, porque los programas de fiestas eran muy sencillos todavía y no tenían artículos, tampoco habían escritores, o no los conocíamos, que escribieran historias sobre la filà. El primer artículo que se publica sobre la fila es de 1958, en la segunda mitad del siglo XX se publican diez artículos en el programa de fiestas, cinco en la última década. Los primeros artículos eran para explicar la historia y las tradiciones de la filà, en formato articulo o entrevista a miembros de la filà. Muchas anécdotas y apreciaciones se repiten en artículos posteriores. A partir del siglo XXI ya nos encontramos con uno cada año. Todo ha cambiado desde la ultima década del siglo pasado. Todas las filas escribían sobre el pasado, contando anécdotas, recordando canciones, explicando tradiciones internas. Ahora, cada año, una fila tienen un espacio en el libro para escribir sobre lo que quiera. Eso ha hecho que hayan salido a la luz historias pasadas y que quedan escritas las actuales, pero todavía tenemos que ir mas lejos, porque en las celebraciones de de los últimos 150 años de las fiestas y de cada una de las filas, todos nos hemos dedicado a recopilar y a publicar todo lo que teníamos en el Maset o lo que nos ha tocado investigar. Todo empieza con una base, un primer artículo donde encuentras el hilo y lo estiras, ese hilo te lleva a otra historia. A veces te equivocas y te encuentras con otra que ahora no te interesa, pero te la guardas para un futuro.
Después de los artículos mencionados, hemos recopilado otros artículos, con el de don Paco. En el año 1992, la Junta de Fiestas editó un libro de 187 páginas donde el presbítero Francisco Vañó Silvestre escribe detalladamente sus hipótesis sobre el origen de todas las filaes, basándose en la documentación que disponía de sus años de investigador. Dedica un par de páginas a la fila.
Después de contactar con el autor, José Francisco Bernat Belda, hemos incluido el artículo que que publicó sobre el pasodoble El Zuavo. Además, en el Maset tenemos un articulo de Ignacio Cantó Salinas sobre el traje de zuavo. A través de Ignacio Silvestre Borrego, Francisco Javier Suárez de la Vega nos facilita el artículo sobre la memoria de los zuavos carlistas del libro Wills y el batallón de zuavos carlistas de 2019. También hemos encargado a Blas Belda Pastor un articulo sobre el CD de música Zuava que grabamos para el 150 aniversario de la filà. Y, finalmente, el articulo que escribí sobre la filà en el libro editado por la Junta de Fiestas para el 150 aniversario de las fiestas de Moros y Cristianos.
La parte final del libro la hemos dejado para todas las imágenes del 150 aniversario celebrado en 2017, aquí encontrareis las imágenes de los paneles de la exposición, fotos de presentaciones, acontecimientos y de las fiestas de aquel año.
Así, como decimos tambien el prologo del libro: con esta publicación, la filà ha recogido en un único volumen todo lo que se ha escrito sobre esta. En un futuro, quien quiera escribir sobre la filà puede acceder fácilmente a toda la documentación sin la necesidad de buscar los artículos en los programas de fiestas o en los libros donde han sido publicados.
En el prologo el libro indicamos “cuando pasen unos años, veinte, treinta, cincuenta o mas, los que vengan detrás nos lo agradecerán, aquí tienen todo o casi todo del siglo XX y la parte que corresponde al siglo XXI. A nosotros nos hubiera gustado tener más referencias del siglo XIX, pero tenemos muy pocas. También es verdad que todavia hay muchos sitios donde poder investigar, pero ninguno lo ha hecho. No sabemos porque aparece la filà Tercio de Zuavos en 1867, podemos intuir que muchos de aquellos componentes, ideológicamente, eran afines al caraísmo, pero que poco a poco aquella ideología fue modificando a lo largo de los años y ya a principios del siglo pasado no encontramos vestigios, solo unos festeros que veneraban a san Blas, que participaban activamente en las fiestas y que estas empiezan en el rincón del fuego con canciones y risas. Un vez llegada los dias de la fiesta mayor, se engalanaban con sus trajes y desfilaban por las calles al sonido de la música que todavía perdura y que son una parte fundamental de la fiesta”.
Un libro lleno de historias zuavos, un libro para la historia zuava.
Vicent Satorres Calabuig
Publicado en la revista programa de les Festes de Moros i Cristians en Honor a Sant Blai de Bocairent (Valencia) en 2022.
